jueves, 10 de noviembre de 2011

La bestia debe morir, de Nicholas Blake.


 Título original: The Beast Must Died.
Año: 1938.
Editorial: Emecé.
Colección: Séptimo Círculo.

Un autor de novelas policiales cuyo hijo ha sido asesinado por un desconocido decide vengar esa muerte. Tiene un plan perfecto y todo está listo: cuando parece que ya no hay salida [para "la bestia"] que cometió la atrocidad que perturba incesantemente al escritor, ocurre lo inesperado. 
La novela es el diario minucioso que registra la búsqueda del culpable y que permite al lector acompañar cada instante en la planificación de la venganza de un padre desencajado por el dolor.

Con esta novela Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares dieron inicio a su colección de novela policial llamada "Séptimo Círculo" en 1945.
Como bien dice la sinopsis, narra la historia de un escritor que sufre la muerte de su pequeño hijo en manos de un conductor que luego de atropellarlo y abandonarlo se dio a la fuga. Frustrado y angustiado porque la policía pronto llegó a la conclusión de que no darían con el asesino, decide tomar la investigación en sus manos y pronto comienza a pensar en todos los detalles que puedan revelarle la identidad de "la bestia". Para ello se vale de su mente lógica y analítica de escritor de novelas policiales y pronto descubre cómo ocurrió el accidente y quién fue el culpable de la muerte del niño.
Un nuevo plan de acción para concretar su venganza, pronto lo lleva ante Lena, una joven actriz de películas mediocres, quien de a poco comienza a enamorarse de ese misterioso escritor sin llegar a conocer su verdadera identidad. Las pruebas de que se encuentra en el camino correcto comienzan a presentarse y no tarda en encontrarse ante el hombre que truncó su vida y su felicidad.


El libro se divide en cuatro partes, iniciando con el diario del protagonista, Frank Cairnes, y él nos va contando cómo lleva la muerte de su hijo y cómo se va gestando en su mente la idea de vengarse del anónimo asesino.
Página a página, nos acercamos cada vez más a "la bestia" y al hombre que busca darle caza sin poner en riesgo su verdadera identidad.
Es a través de su visión que vamos conociendo a los demás personajes: la bella y en apariencia superficial Lena, con quien "Félix Lane" comienza un romance; el ególatra y despiadado George Rattery; el joven y sensible Phil, criado entre la violencia de su familia y las mujeres que lo rodean: su madre Violeta y su nada agradable abuela, Mrs. Rattery.
Es muy fácil sentirse conmovida y comprender a este hombre que siente que su vida acabó en el momento en que lo hizo la de su pequeño. La injusticia de lo ocurrido, la impotencia, el dolor, hacen de esta primer parte una de las más duras, sobre todo en las primeras páginas.
La segunda parte no forma parte del diario. Narra lo que ocurre una vez que Félix Cairnes, como luego deciden llamarlo, lleva a cabo su venganza y confronta al asesino.
Está todo muy detallado y fue para mí una de las partes más sorprendentes del libro, pues la historia da un giro crucial e inesperado.
En la tercer parte entran en la historia nuevos personajes: Nigel Strangeways, quien llega al pueblo junto a su esposa, con la intención de resolver el homicidio y encontrar al verdadero culpable; y el inspector de Scottland Yard, Blount, quien busca el mismo fin. Juntos comienzan a indagar entre estos personajes en busca de la verdad, revelándonos nuevos puntos de vista y detalles que desconocíamos.


La historia cambia cada vez, pero el ritmo atrapante no decrece nunca. Los personajes son complejos y bien construidos. De inmediato es fácil visualizarlos y simpatizar o no con ellos. La historia se va narrando en nuestra imaginación tal cual lo hiciera en una película y el aire de época en plena Segunda Guerra Mundial le brinda un encanto único, como sólo las novelas escritas entonces pueden tener.
Pese a que en un principio, y como ya mencioné, la historia tiene un aire dramático muy fuerte, en las últimas partes se aprecia un marcado sentido del humor. 
Los diálogos son muy fluídos y el desarrollo de la investigación no cesa ni en la última página. 


Con un final sorprendente y hasta inesperado, "La bestia debe morir" es una de las mejores novelas policiales que he leído hasta el momento y que recomiendo sin dudar a todos los que gusten del género y de libros muy bien narrados.


Sobre el autor:

Cecil Day-Lewis
(o Day Lewis) nació el 27 de april de 1904 y falleció el 22 de mayo de 1972. Poeta lírico de exquisito talento, crítico y novelista policíaco irlandés. Graduado en Oxford, publicó su primer libro de poemas, Beechen Vigil, en 1925. Tres años después apareció Country Comets, seguido deTransitional Poem, que le dio renombre y en el que trabajó con gran sutileza la articulación entre lo social y lo personal.
A comienzos de la década del treinta se afilió al partido comunista y publicó un libro de crítica titulado A Hope for Poetry (1934). Tras dos volúmenes de búsqueda formal, From Feather to Iron (1931), y The Magnetic Mountain (1933), intentó una poesía más programática en A Time to Dance (1935), pero retornó, en Overtures to Death (1938), a una complejidad en la que combinaba la herencia postsimbolista con las experimentaciones de la vanguardia europea de principios del siglo XX.

En 1939 renunció al partido comunista, aunque mantuvo su ideario de izquierda; fue profesor en Oxford (1951-1956) y en Harvard (1964-1965). Realizó soberbias traducciones de Virgilio y P. Valéry y fue Poeta Laureado desde 1968.

Con el seudónimo de Nicholas Blake, publicó un buen número de excelentes novelas de intriga; no fue casualidad que J. L. Borges y A. Bioy Casares eligieran La bestia debe morir para inaugurar, en los años cincuenta, una legendaria colección argentina de novela policíaca, El séptimo círculo.

Su autobiografía, The Buried Day, apareció en 1960. Fue miembro del llamado "grupo de Oxford", asociación de poetas de izquierda de la que formaban parte S. Spender, W. H. Auden y L. McNeice; como todos ellos, se caracterizó por ser activamente beligerante a favor de la República en la Guerra Civil española.



Según John Strachey "Cuando condesciende con Nicholas Blake escribe mejor que cuando se da por entero a la literatura', como Day Lewis."

Bibliografía en español como Nicholas Blake:

  • 1945. La bestia debe morir. Buenos Aires: Emecé.
  • 1946. Los toneles de la muerte. Buenos Aires: Emecé.
  • 1946. Cuestión de pruebas. Buenos Aires: Emecé.
  • 1948. El abominable hombre de nieve. Buenos Aires: Emecé.
  • 1948. Malicia en el país de las maravillas. Buenos Aires: Pingüino.
  • 1951. La cabeza del viajero. Buenos Aires: Emecé.
  • 1954. El hueco fatal. Buenos Aires: Emecé.
  • 1955. Susurro en la penumbra. Buenos Aires: Emecé.
  • 1958. Fin de capítulo. Buenos Aires: Emecé.
  • 1958. La marana. Buenos Aires: Emecé.
  • 1960. El crucero de la vida. Buenos Aires: Emecé.
  • 1960. Un puñal en mi corazón. Buenos Aires: Emecé.
  • 1961. El gusano de la muerte. Buenos Aires: Emecé.
  • 1965. La burla siniestra. Buenos Aires: Emecé.
  • 1967. La triste variedad. Buenos Aires: Emecé.

El libro en el cine:


El libro ha tenido varias adaptaciones a la gran pantalla. En 1952 fue adaptada en Argentina por el director Román Viñoly Barreto y las actuaciones de Narciso Ibáñez Menta, Guillermo Battaglia, Laura Hidalgo y Milagros de la Vega.


(Descárgala acá)


En 1969 Claude Chabrol estrenó su versión de la historia en Francia, con las actuaciones de Michel Duchassoy, Caroline Ceiler y Jean Yanne. El título de la película es "Que la bête meure".




Voy a matar a un hombre. No sé cómo se llama, no sé dónde vive, no tengo idea de su aspecto. Pero voy a encontrarlo y lo mataré...

Fuentes:

Biografía: Biografías y Vidas.

1 leyeron conmigo:

Margari dijo...

Gran reseña. Me has dejado con ganas de descubrir esta novela, de la que no sabía nada hasta ahora.
Besotes!!!