lunes, 21 de marzo de 2011

Juan Manuel Vasquéz: ganador del Premio Alfaguara de Novela 2011.


El escritor colombiano Juan Gabriel Vásquez ha sido galardonado con el Premio Alfaguara de Novela 2011, dotado con 175.000 dólares (unos 133.306 €) y una escultura de Martín Chirino, por la obra El ruido de las cosas al caer, presentada bajo el título Todos los pilotos muertos y con el seudónimo Raúl K. Fen. El jurado, presidido por Bernardo Atxaga y compuesto por Gustavo Guerrero, Lola Larumbe, Candela Peña, Imma Turbau y Juan González, ha declarado ganadora la novela por unanimidad.


Un total de 608 manuscritos inéditos, escritos en castellano, han concurrido a esta XIV edición del Premio Alfaguara. De ellos, 231 proceden de España, 105 de Argentina, 99 de México, 46 de Colombia, 29 de Estados Unidos, 25 de Perú, 19 de Chile y 14 de Venezuela. También en Bolivia se han recibido 14 originales, 12 en Ecuador, 5 en Uruguay, 5 también en la República Dominicana y 4 en Paraguay.


Sobre el autor:


Juan Gabriel Vásquez nació en Bogotá en 1973. Es autor del libro de relatos Los amantes de Todos los Santos (Alfaguara 2001) y de dos novelas. Los informantes fue elegida en Colombia como una de las novelas más importantes de los últimos veinticinco años y fue finalista del Independent Foreign Fiction Prize en el Reino Unido. Historia secreta de Costaguana ha obtenido el premio Qwerty a la mejor novela en castellano (Barcelona), el premio Fundación Libros & Letras (Bogotá) y está actualmente en la lista de los finalistas del finalista del Independent Foreign Fiction Prize que se falla el próximo 26 de mayo en Londres.

Ha vivido en París y en las Ardenas belgas, y en 1999 se instaló definitivamente en Barcelona. Ha traducido obras de John Hersey, Victor Hugo y E. M. Forster, entre otros, y su labor periodística también es destacada: Vásquez es columnista del periódico colombiano El Espectador, y ganó el Premio de Periodismo Simón Bolívar con El arte de la distorsión, ensayo incluido en el libro del mismo título. También es autor de una breve biografía de Joseph Conrad, El hombre de ninguna parte (2007). Sus libros están traducidos a catorce lenguas.


El ruido de las cosas al caer.


La exótica fuga y posterior caza de un hipopótamo, último vestigio del imposible zoológico con el que Pablo Escobar exhibía su poder, es la chispa que arranca los mecanismos de la memoria de Antonio Yammara, protagonista y narrador de El ruido de las cosas al caer, un negro balance de una época de terror y violencia, en una Bogotá descrita como un territorio literario lleno de significaciones. 

En 1995, Antonio conoce al intrigante Ricardo Laverde, quien ha pasado veinte años en la cárcel. Laverde, de quien se sabe que fue piloto, forma parte de la parroquia de unos billares donde Yammara, joven profesor universitario de Derecho, consume el ocio de su última juventud. Entre los dos se fraguará una estrecha amistad, y Antonio, que pasa por la vida desdibujado por la duda, creerá ver en la experiencia torturada de su amigo un aviso. 

Antonio intentará comprender a la generación de Laverde (la de sus padres, en definitiva, con sus historias de amor), para valorar el grado de inocencia y de complicidad que les corresponde en la creación de un clima social dominado por la corrupción, el caos y la violencia. El filtro de la memoria permite realizar un recorrido palpitante por la historia reciente de Colombia, recuperando a personajes atractivos y complejos. Es el caso de Ricardo Laverde, un perdedor en el que se advierte el magisterio de Juan Marsé, de MarioVargas Llosa y, sobre todo, en la imagen central del aviador, concretamente del aviador perdido o accidentado, de Juan Carlos Onetti: “All the dead pilots” es el título del cuento de Faulkner favorito del escritor uruguayo, quien además lo tradujo.



Gracias a Ediciones Santillana Uruguay por la información.

3 leyeron conmigo:

Eli dijo...

ohh! que orgullo! que gana un colombiano!

Maga DeLin dijo...

Felicidades, Liz!!

Para todos nosotros no deja de ser una alegría, ya que se trata de un latinoamericano, y de uno con una interesante trayectoría, por lo que se ve.

Besos!!

kroana dijo...

Que felicidad que gana un Colombiano, aunque soy de Venezuela no dejo de sentir orgullo y alegria, sobre todo por ganar de entre tantas personas, espero leer su libro en algun momento!!!

Besos ^^