El género fantástico, comúnmente llamado fantasía, es un género artístico deficción en el cual los elementos principales del argumento son imaginarios, irreales y sobrenaturales.
En su sentido más amplio, el género fantástico se halla presente en la literatura,cinematografía, historieta, videojuegos, juegos de rol, pintura, escultura, drama y, sobre todo, en la mitología y relatos antiguos, donde tuvo su origen. Se caracteriza por no dar prioridad a una representación realista que respete las leyes de funcionamiento del mundo real. En ese sentido se suele decir que el género fantástico es subversivo, pues viola las normas de la realidad.
Generalmente se lo distingue de otras formas artísticas como la ciencia ficción -en la que también se subvierten los mecanismos de funcionamiento de la realidad conocida- aduciendo que la causa de los fenómenos observados en obras de corte fantástico siempre tienen que ver con fuerzas sobrenaturales mientras que en la ciencia ficción hay causas “cientifizadas”, con explicaciones que buscan la racionalidad dentro de su ruptura con el orden conocido. Por eso, algunos autores opinan que la diferencia entre el relato fantástico y el de ciencia-ficción radica no tanto en los hechos sobrenaturales como en el modo en que el autor presenta y explica los mismos.
Definición.
Tanto Marcel Schneider como Eric S. Rabkin clasificaron en sus respectivos estudios como relato fantástico a todo tipo de ficción no-realista. Rabkin incluso ha ido más allá englobando el relato policial y la ciencia ficción dentro del mismo grupo.
Según Vladímir Soloviov «En lo fantástico verdadero, siempre existe la posibilidad exterior y formal de una explicación simple de los fenómenos, pero al mismo tiempo esa explicación está privada por completo de probabilidad interna». Para Louis Vax el relato fantástico presenta hombres comunes del mundo real ubicados repentinamente ante un fenómeno inexplicable. Para Dostoievski , el verdadero exponente del género no debe romper nunca el enigma que mantiene al lector dudando de los orígenes de la ruptura con la legalidad. «Lo fantástico debe estar tan cerca de lo real que uno casi tiene que creerlo».
Definición de Maupassant:
Maupassant también insistió en la importancia del temor en la identificación del relato fantástico, miedo que deviene de la inseguridad a la que es arrastrado el lector. Todorov, por el contrario considera que «El temor se relaciona a menudo con lo fantástico, pero no es una condición necesaria de su existencia».
Definición de Todorov:
Con estas condiciones en mente, Todorov opone lo que él llama fantástico puro a otros dos conceptos lindantes:
Lo fantástico ocupa el tiempo de esta incertidumbre; en cuanto se elige una respuesta u otra, se abandona lo fantástico para entrar en un género vecino: lo extraño o lo maravilloso. Lo fantástico es la vacilación que experimenta un ser que sólo conoce las leyes naturales, ante un acontecimiento al parecer sobrenatural.
Lo extraño o insólito es una categoría que agrupa a aquellos relatos en los cuales las causas, aparentemente sobrenaturales e inexplicables por vías racionales terminan por tener una explicación que concuerda con las leyes del mundo cognoscible, como ocurre en el cuento “Los crímenes de la Rue Morgue” de Edgar Allan Poe o en las ficciones góticas de Clara Reeve o Ann Radcliffe. Lo maravilloso sería aquello que se ubica en el lado opuesto a lo insólito, siendo aquel conjunto de obras en que la incertidumbre es despejada pero su explicación remite a nuevas leyes que no van de acuerdo a la realidad conocida, lo que ocurre en las obras de Walpole. Así, el estudioso señala que el fantástico propiamente dicho es escaso y abarcaría ejemplos como Otra vuelta de tuercade Henry James, donde la intriga no es resuelta o Manuscrito encontrado en Zaragoza de Jan Potocki.
Todorov amplió su clasificación diciendo que lo maravilloso corresponde a lo desconocido, lo que está por venir -por lo tanto corresponde al tiempo futuro- y lo extraño a una experiencia previa en la cual se produce la irrupción de lo anormal -por lo tanto corresponde al pasado-. Además, estas dos formas que se hallan a ambos lados del fantástico tienen subdivisiones: la zona de lo insólito que linda con lo fantástico se llama fantástico-insólito. Allí hay explicaciones racionales a las dudas despertadas por el texto, pero abundan las coincidencias sospechosas; "La caída de la casa Usher" es el ejemplo que Todorov esgrimió para ilustrar este punto. El extremo de esta forma está en lo extraño-puro, donde las explicaciones racionales son perfectamente plausibles como exégesis de incidentes en apariencia sobrenaturales -como ocurre en muchas novelas policiales que coquetean con la idea de un crimen cometido por fuerzas sobrehumanas-. Lo fantástico maravilloso, por otro lado, es lo más cercano al fantástico puro, pero en él se acepta la exégesis irracional tras la duda inicial. En lo maravilloso puro -cuyos límites no están muy bien definidos según el estudioso- los eventos anormales son comunes y no reciben reacción particular por parte de lo personajes o el lector.
Las propuestas de Todorov, no obstante, han recibido algunas críticas y objeciones por su enfoque cerrado. En su prólogo a la Introducción a la literatura fantástica, Elvio Gandolfo escribió acerca de las conclusiones del estudio que:
Según una de ellas, lo fantástico propiamente dicho habría durado apenas unas décadas del siglo XIX […] Aplicada al extremo, la definición deja un porcentaje más alto de relatos fuera que los que abarca, y limita demasiado su alcance en el tiempo. Por otra parte la definición de ese tono como “género” le hace tratar sin demasiada definición a géneros indiscutibles como el policial y, sobre todo, la ciencia-ficción, erróneamente considerada casi como una sucursal de lo fantástico.
La crítica de Gandolfo apunta a que Todorov consideró que la irrupción del psicoanálisis liquidó el componente irracional produciendo la muerte del género. Rosemary Jackson también habla de las limitaciones del estudio de su colega pero adujo que Todorov no tuvo en consideración las ventajas del enfoque psicoanalítico para abordar los relatos fantásticos.
Definición de Rosemary Jackson:
En Fanstasy: Literatura y subversión ella propone estudiar el fantasy -término específico que utiliza- no como un género, tal y como lo hizo Todorov, sino como un modo literario. Esta perspectiva permitiría entender cómo el fantasy adopta diferentes “disfraces” en relatos de cortes tan disímiles.
Otras definiciones:
La italiana Rosalba Campra define al género en torno a los silencios, comparando en algún punto la relación texto-lector con un modelo de comunicación. En un relato, el silencio (término empleado para designar lo que permanece oculto) puede encontrar una resolución o no. Aquellos que permanecen en el territorio de lo enigmático corresponden al fantástico, «un silencio cuya naturaleza y función consisten precisamente en no poder ser llenado».
Historia - Antecedentes.
Antigüedad.
Gilgamesh.
Las primeras muestras de elementos fantásticos pueden encontrarse, en efecto, en antiguas narraciones con fuerte presencia de elementos folklóricos, arraigadas en el imaginario colectivo. El Poema de Gilgamesh, composición sumeria del 2000 a. C., sería uno de los primeros textos que incorporaron elementos como gigantes, dioses e intervenciones sobrenaturales. La influencia de este poema épico puede verse en Homero, particularmente en la construcción de Aquiles y Patrocloen La Ilíada. La Odisea, otro poema homérico, incluyó numerosos episodios en los cuales intervenían los dioses olímpicos con sus prodigiosos poderos así como criaturas de asombrosas habilidades.Otras obras de autores como Apuleyo (El asno de oro) o el fabulista griego Esopo también se constituyen como prototipos de ficciones correspondientes al género de lo maravilloso por el tipo de elementos que se hallan en su centro.
Además de las grandes composiciones poéticas, la gran cantidad de mitos y leyendas circulantes en las culturas mesopotámica, griega y romana también presentaba constantes elementos metafísicos. Así, la canción de la diosa sumeriaInanna, las criaturas a las que se enfrentaron los héroes Jasón y Teseoo las metamorfosis que luego describió Ovidio en su obra constituyen el muestrario de intrusiones de la magia y lo sobrenatural en lo relatos de difusión oral.
Edad Media.
Algunos de los grandes poemas del período -los sajones Beowulf y el Cantar de los Nibelungos, el Fornaldarsaga islándico, el Mahábharata indio- narraban grandes sucesos con posibles raíces históricas pero distorsionados por la intervención de lo mitológico. Otras composiciones como el Poema del Mío Cid optaron por un enfoque más realista, con alguna utilización de episodios milagrosos pero no la participación de los monstruos o criaturas prodigiosas.
A partir de algunos de estos poemas se formaron romances fragmentarios que narraban episodios de lo que alguna vez fueron esos largos poemas. Estas composiciones sufrieron las distorsiones propias de la transmisión oral y experimentaron la incursión de elementos que no se encontraban anteriormente. Según algunos estudios, muchos de estos poemas provenían en realidad de diferentes leyendas que fueron unificadas por los diversos poetas, por lo cual esta fragmentación sería una vuelta a los orígenes de los mismos.
A partir de algunos de estos poemas se formaron romances fragmentarios que narraban episodios de lo que alguna vez fueron esos largos poemas. Estas composiciones sufrieron las distorsiones propias de la transmisión oral y experimentaron la incursión de elementos que no se encontraban anteriormente. Según algunos estudios, muchos de estos poemas provenían en realidad de diferentes leyendas que fueron unificadas por los diversos poetas, por lo cual esta fragmentación sería una vuelta a los orígenes de los mismos.
Ilustración de un alma llevada al infierno en la Divina Comedia.
El mito clásico pervivió gracias al impacto que la Eneida de Virgilio tuvo en la Edad Media, llegando hasta obras como la Divina Comedia. De otras procedencias son Las mil y una noches -cuyo impacto cultural se sintió más bien en el siglo XVIII gracias a su traducción-, que introdujo el género märchen, y el poema épico de Irán, el Shahnameh.
El carnaval, una celebración pública que tiene lugar inmediatamente antes de la cuaresma, era el momento en que las rígidas normas de vida eran trastocadas momentáneamente. Jackson señaló la posible génesis del fantático moderno en esta festividad de origen medieval, ya que el fantástico es una expresión que, al igual que esas festividades, subvierte las normas que rigen el funcionamiento del mundo.
Modernidad.
Ilustración del Quijote de la Mancha.
Las apariciones sobrenaturales también invadieron el teatro de William Shakespeare, como ocurrió en Hamlet, donde aparece la sombra del padre del protagonista para reclamar venganza. En la obra hay un famoso pasaje en que Hamlet se cuestionaba si dicha aparición es en verdad su padre o un engaño del demonio, introduciendo, al menos en forma parcial, la incertidumbre que definiría al género fantástico tal y como se lo conoce actualmente. En Macbeth,Sueño de una noche de verano y La tempestad también se dan cita la magia y criaturas como los faunos. En The Faerie Queene, Edmund Spencer utilizó elementos similares en esta suerte de historia alegórica de caballeros, elfos y demás criaturas.
En Francia, la presencia de lo maravilloso -o Merveilleux como se lo denominó- durante el reinado de Francisco I y sus sucesores produjo el asentamiento de los cuentos de hadas. El italiano Giambattista Basile fue uno de los primeros en recopilar y refundir cuentos populares, como ocurrió en el famoso libro Lo cunto de li cunti overo lo trattenemiento de peccerille (1634) que fue decisivo para definir el género. Su influencia se hizo sentir sobre Charles Perrault, cuyos cuentos con moralejas expresadas en versos finales neutralizarían el elemento maravilloso a favor de la alegoría, según Todorov. Madame d'Aulnoy, con sus contes de fées, fue otra autora popular cuya influencia en el uso de elementos folklóricos llegó hasta el romanticismo.
Aparición del Rey en Hamlet.
Durante el siglo XVIII, otras disciplinas artísticas como la ópera incorporaron cada vez más elementos fantásticos como ocurrió con La flauta mágica deWolfgang Amadeus Mozart. La opera, como lo hizo desde su nacimiento, reutilizó la mitología pero gracias a Mozart acentuó una tendencia que convirtió esta utilización en algo más serio que en la opera buffa italiana.
Edad Contemporánea: los orígenes del fantástico propiamente dicho.
Romanticismo Gótico:
Los relatos góticos de autores como Horace Walpole (El castillo de Otranto) o Matthew Gregory Lewis (El monje) estarían entre los primeros autores modernos de ficciones fantásticas junto al alemán E. T. A. Hoffmann. No obstante, las diversas teorías genéticas apuntan no a los orígenes modernos sino a la época de la cultura oral, al folklore y la difusión de relatos boca a boca como verdadera fuente del género.
Cenicienta, clásico cuento de hadas de Perrault.
La transformación del fantástico moderno fue analizada por Maupassant, quien sostuvo que los cambios en diferentes aspectos de la vida (educación, economía,jurisprudencia, religión) produjeron que el sujeto moderno abandonara lassupersticiones o que al menos no fuese tan crédulo como antes. Por ese motivo, sumado a la existencia de un autor tangible -de lo cual carecía el relato folklórico-, los escritores debieron ingeniárselas para producir los efectos propios del género sirviéndose de nuevos medios.
Características:
Los rasgos del género fantástico se basan en la inclusión de elementos fantásticos en la coherencia interna. Dentro de esa estructura, cualquier tipo de elemento fantástico es posible: puede tratarse de fenómenos ocultos en un mundo aparente real, puede trasladar a los personajes de un mundo con tales elementos, o puede que el argumento se produzca totalmente en un mundo fantástico, donde estos elementos son parte del mismo.
Aunque los elementos irreales e imaginarios sean la base de la trama, esta debe tener su propia coherencia, ya que si no pertenecerá al género surrealista y no al fantástico.
Medios:
Subgéneros:
La evoluciones del género fantástico moderno han generado muchos nuevos subgéneros sin una clara contrapartida en la mitología o el folclore, aunque la inspiración en estos sigue siendo el tema más recurrente. Los subgéneros fantásticos son numerosos y muy diversos, y con frecuencia se superponen con otras formas de ficción en casi todos los medios en los que se producen. Cabe hacer especial mención en los subgéneros de ciencia ficción y terror.
Tomado de Wapedia.
Algunas de las imágenes también son de Wapedia, otras las tomé de Google.
1 leyeron conmigo:
Saludos cordiales desde la norpatagonia argentina.
Les invito a visitar el sitio blog
www.fantasiayartefactos.blogspot.com
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